Post by HBF on Sept 16, 2010 18:52:10 GMT -3
Por Lydiette Carrión
Maltrato animal en Facebook
27-05-2010
En un país marcado por la violencia del narcotráfico, como México, el caso podría haber pasado inadvertido. Pero no fue así. Un menor de edad, estudiante de un bachillerato técnico, en Tepic, Nayarit (en el oeste del país), subió a su página de Facebook un video en el que, junto con otros tres adolescentes, y dos perros de raza pitbull, torturaban hasta la muerte a un perro callejero. En el video se ve cómo los jóvenes retienen a la víctima, mientras azuzan a sus mastines para que la muerdan y lastimen. Cuando el perro trata de incorporarse, uno de los adolescentes lo toma de las patas traseras y lo azota contra el piso. Todo entre las risas de los jóvenes y los aullidos de agonía del perro, al que la comunidad de Facebook bautizó luego como “Callejerito”.
El golpe mortal lo da uno de los adolescentes: lo golpea con un palo hasta que el perro no se levanta más. Marco, el adolescente que subió el video, calificó el hecho como una “aventurilla”.
El diario digital Nayarit publicó la información el 16 de abril. Protegió los nombres de los adolescentes y les cubrió las caras. Pero en Facebook, los usuarios hicieron públicos sus nombres y apellidos, la escuela a la que asisten e incluso las direcciones personales y sus correos electrónicos.
El hecho viajó rápido. El video fue subido a Youtube y en el lapso de tres días tuvo 75.000 visitas, un récord para los videos nayaritas; aunque muchas personas confesaron no tener la capacidad de verlo por más de 20 segundos. Entonces, se formaron páginas en contra de los jóvenes en Facebook, a la que se sumaron personas no sólo del estado y de México, sino de toda América Latina, España y otros países de Europa.
Fue tal el clima de condena que se generó, que el 21 de abril, los adolescentes accedieron a una entrevista en una estación de radio local, Capital 1980, con el locutor Alejandro Gandara, para dar su versión. Alegaron que el perro había mordido a uno de ellos y que llamó a la perrera varias veces y ésta nunca llegó. Aseguraron estar muy arrepentidos, y alegaron que cuando torturaron y mataron al perro eran “muy jóvenes”. El hecho había tenido lugar un año atrás, en junio de 2009. Los chicos, que ahora tienen entre 16 y 17 años, tenían 15 y 16.
Lo paradójico, hicieron notar decenas de personas en las redes sociales, es que los adolescentes nunca se mostraron arrepentidos o confundidos hasta que fueron objeto de una severa condena social. Por torturar y matar al perro con alegría y subirlo a Internet, lo único que recibieron es una multa equivalente a US$ 31 y la obligación de ir a asesoría psicológica y hacer trabajo comunitario.
Y es que en Nayarit, y en todo México, la tortura y el dar muerte a animales está considerado, como mucho, una falta administrativa. No existe una ley federal para lidiar con esta situación, excepto para el caso de personas que trafiquen con animales exóticos o en peligro de extinción. Por ejemplo, en el Distrito Federal, la sanción prevista contra una persona que maltrató animales de modo reiterado es 36 horas de arresto administrativo y una multa.
En otras palabras, no se sanciona el maltrato y abuso a un ser vivo que siente y tiene la capacidad de sufrir. En un país que es testigo a diario de “narcomensajes”, videos de asesinatos cometidos por el crimen organizado, el video de la tortura de “Callejerito” tuvo una fuerte respuesta social. Este sábado 22, hubo marchas masivas en todo el país contra el maltrato animal. “Todos somos Callejerito”, repetían los manifestantes.
Manuel Gil, sociólogo en la Universidad Autónoma Metropolitana, advierte que “el caso tiene varias connotaciones: el maltrato a un animal es espantoso porque éste no habla y no se puede defender; y, además, no está en un marco legal. Esto genera que se considere que es una acción reprobable, bajo el (falso) supuesto de que los humanos sí se pueden defender”.
Además, agrega Gil, “me parece que la saña y la crueldad se manifiestan [cuando] lanzan a unos perros de pelea contra un perrito callejero, lo que ilustra la desigualdad en el combate. Pero, también, porque la sociedad no está acostumbrada a ver esto. Porque si vieran cómo crían a los pollitos que se usan en [una famosa cadena internacional de restaurantes], o cómo los franceses entierran a los patos para que no se muevan y así crear el paté de foie… no tenemos imágenes de cómo matan en el rastro a los animales… me parece que, en la reacción tan fuerte por este caso, lo que hay es un sentimiento de culpa, sobre todo en la clase media”.
En breve, el Congreso nayarita presentaría una iniciativa para incluir en el código penal el maltrato animal. También se impulsó reformas al código penal en otros distritos. En América Latina, de acuerdo con el diputado verde Norberto Ascensio Solís Cruz, sólo Chile y la Argentina ya legislaron conforme a la tendencia de muchos países europeos. Pero “salvo estos casos, no ha existido la conciencia social que reconozca los derechos de los animales como un elemento propio de la moral humana”, dice.
Qué pena que haya que legislar para proteger al mejor amigo del hombre... del hombre mismo.
Carrión es una periodista mexicana.
www.elargentino.com/Content.aspx?Id=92360
Maltrato animal en Facebook
27-05-2010
En un país marcado por la violencia del narcotráfico, como México, el caso podría haber pasado inadvertido. Pero no fue así. Un menor de edad, estudiante de un bachillerato técnico, en Tepic, Nayarit (en el oeste del país), subió a su página de Facebook un video en el que, junto con otros tres adolescentes, y dos perros de raza pitbull, torturaban hasta la muerte a un perro callejero. En el video se ve cómo los jóvenes retienen a la víctima, mientras azuzan a sus mastines para que la muerdan y lastimen. Cuando el perro trata de incorporarse, uno de los adolescentes lo toma de las patas traseras y lo azota contra el piso. Todo entre las risas de los jóvenes y los aullidos de agonía del perro, al que la comunidad de Facebook bautizó luego como “Callejerito”.
El golpe mortal lo da uno de los adolescentes: lo golpea con un palo hasta que el perro no se levanta más. Marco, el adolescente que subió el video, calificó el hecho como una “aventurilla”.
El diario digital Nayarit publicó la información el 16 de abril. Protegió los nombres de los adolescentes y les cubrió las caras. Pero en Facebook, los usuarios hicieron públicos sus nombres y apellidos, la escuela a la que asisten e incluso las direcciones personales y sus correos electrónicos.
El hecho viajó rápido. El video fue subido a Youtube y en el lapso de tres días tuvo 75.000 visitas, un récord para los videos nayaritas; aunque muchas personas confesaron no tener la capacidad de verlo por más de 20 segundos. Entonces, se formaron páginas en contra de los jóvenes en Facebook, a la que se sumaron personas no sólo del estado y de México, sino de toda América Latina, España y otros países de Europa.
Fue tal el clima de condena que se generó, que el 21 de abril, los adolescentes accedieron a una entrevista en una estación de radio local, Capital 1980, con el locutor Alejandro Gandara, para dar su versión. Alegaron que el perro había mordido a uno de ellos y que llamó a la perrera varias veces y ésta nunca llegó. Aseguraron estar muy arrepentidos, y alegaron que cuando torturaron y mataron al perro eran “muy jóvenes”. El hecho había tenido lugar un año atrás, en junio de 2009. Los chicos, que ahora tienen entre 16 y 17 años, tenían 15 y 16.
Lo paradójico, hicieron notar decenas de personas en las redes sociales, es que los adolescentes nunca se mostraron arrepentidos o confundidos hasta que fueron objeto de una severa condena social. Por torturar y matar al perro con alegría y subirlo a Internet, lo único que recibieron es una multa equivalente a US$ 31 y la obligación de ir a asesoría psicológica y hacer trabajo comunitario.
Y es que en Nayarit, y en todo México, la tortura y el dar muerte a animales está considerado, como mucho, una falta administrativa. No existe una ley federal para lidiar con esta situación, excepto para el caso de personas que trafiquen con animales exóticos o en peligro de extinción. Por ejemplo, en el Distrito Federal, la sanción prevista contra una persona que maltrató animales de modo reiterado es 36 horas de arresto administrativo y una multa.
En otras palabras, no se sanciona el maltrato y abuso a un ser vivo que siente y tiene la capacidad de sufrir. En un país que es testigo a diario de “narcomensajes”, videos de asesinatos cometidos por el crimen organizado, el video de la tortura de “Callejerito” tuvo una fuerte respuesta social. Este sábado 22, hubo marchas masivas en todo el país contra el maltrato animal. “Todos somos Callejerito”, repetían los manifestantes.
Manuel Gil, sociólogo en la Universidad Autónoma Metropolitana, advierte que “el caso tiene varias connotaciones: el maltrato a un animal es espantoso porque éste no habla y no se puede defender; y, además, no está en un marco legal. Esto genera que se considere que es una acción reprobable, bajo el (falso) supuesto de que los humanos sí se pueden defender”.
Además, agrega Gil, “me parece que la saña y la crueldad se manifiestan [cuando] lanzan a unos perros de pelea contra un perrito callejero, lo que ilustra la desigualdad en el combate. Pero, también, porque la sociedad no está acostumbrada a ver esto. Porque si vieran cómo crían a los pollitos que se usan en [una famosa cadena internacional de restaurantes], o cómo los franceses entierran a los patos para que no se muevan y así crear el paté de foie… no tenemos imágenes de cómo matan en el rastro a los animales… me parece que, en la reacción tan fuerte por este caso, lo que hay es un sentimiento de culpa, sobre todo en la clase media”.
En breve, el Congreso nayarita presentaría una iniciativa para incluir en el código penal el maltrato animal. También se impulsó reformas al código penal en otros distritos. En América Latina, de acuerdo con el diputado verde Norberto Ascensio Solís Cruz, sólo Chile y la Argentina ya legislaron conforme a la tendencia de muchos países europeos. Pero “salvo estos casos, no ha existido la conciencia social que reconozca los derechos de los animales como un elemento propio de la moral humana”, dice.
Qué pena que haya que legislar para proteger al mejor amigo del hombre... del hombre mismo.
Carrión es una periodista mexicana.
www.elargentino.com/Content.aspx?Id=92360